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El cáncer no posee preferidos. Da igual de qué color seas, si eres joven o bien viejo, o bien si vives en un ático o bien en un vecindario de chabolas. En el momento en que llega el diagnóstico, como va a ocurrir con la mitad de en nuestra vida, ponemos nuestras esperanzas en entrar al mejor régimen para aumentar al máximo nuestras opciones de supervivencia.
Hace precisamente un año, George Gannon, de 30 años, se encaró a un futuro sombrío. Los médicos habían descubierto más de 12 tumores en su cerebro. El melanoma que había extraído tres años antes había hecho metástasis.
La naturaleza combativa del melanoma BRAF positivo de George significó que inclusive con los tratamientos estándar de radioterapia, inmunoterapia y quimioterapia, sus tumores habían incrementado de tamaño. Con un pronóstico de seis meses y sin configuraciones encima de la mesa, el cannabis parecía ser la única promesa.
George se encontraba resuelto a conseguir un aceite de cannabis que tenga dentro THC , el cannabinoide que hasta la actualidad tiene la prueba más sólida de efectos antitumorales . 1 Mas vivir en el Reino Unido quería decir que algún otra cosa que no fuesen los aceites de CBD a base de cáñamo era ilegal. Entonces se dirigió al mercado negro.
George empezó a tomar su aceite de cannabis inmediatamente antes de Navidad el año pasado. En su siguiente resonancia imantada en el mes de marzo, sus tumores habían dejado de medrar. A lo largo de los meses siguientes reinició la quimioterapia con dosis bajas, sin interrumpir ni solo una vez su terapia con cannabinoides.
La próxima exploración en el mes de agosto fue una sorpresa tanto para George para su oncólogo: la masa primordial en su ventrículo izquierdo había desaparecido y las otras lesiones que sobran habían disminuido de tamaño.
El oncólogo, que le había dicho reiteradamente a George que dejase de tomar aceite de cannabis, mencionó que era el más destacable día de su carrera. Mas no reconocería que el cannabis ha podido haber jugado un papel en la reversión del cáncer.
La reacción del oncólogo tipificó el escepticismo de los expertos de la salud respecto al cannabis y el cáncer. Sin pruebas sólidas de los ensayos clínicos, la mayor parte de los médicos desechan la iniciativa de que el cannabis logre tener efectos antitumorales en los pacientes. Lo que expone la pregunta: ¿qué tan lejos nos encontramos de conseguir la prueba clínica sólida que se requiere para seducir a la profesión médica de que el cannabis es un régimen contra el cáncer serio?
¿Por qué razón tan pocos ensayos clínicos?
La única forma de que un fármaco se incorpore al armamento anticanceroso de los oncólogos es que pase de forma exitosa por tres fases de ensayos clínicos aleatorizados, doble ciego, con placebo que prueben la seguridad, la dosificación y la efectividad.
Pasaron trece años desde el momento en que el primer pequeño estudio conduzco fue llevado a cabo por el instructor Manuel Guzmán y su conjunto en la Facultad Complutense de La capital española. 2 Probaron la seguridad y la acción antitumoral del THC en un pequeño conjunto de pacientes con glioblastoma recurrente, una manera combativa de cáncer cerebral, y los desenlaces fueron alentadores.
Project CBD charló con Guzmán para saber por qué razón, más de una década después, el avance fué tan retardado. Una respuesta reside en la naturaleza del cáncer en sí.
“El cáncer es una patología muy complicada”, afirma Guzmán. “Hay cuando menos 150 tipos distintas de cáncer desde un criterio histológico y hay cientos, si no miles, desde un criterio molecular o bien de perfil genético. Entonces, en el momento en que charlamos de cannabis o bien algún régimen para el cáncer, primero debe determinar qué género de cáncer nos encontramos intentando porque es verdaderamente improbable que una substancia única o bien una mezcla de substancias similares, como es la situacion del cannabis, sea eficiente en toda clase de cáncer. “
Hasta hoy, todos y cada uno de los ensayos clínicos basados en cannabis se han basado en pacientes con glioblastoma. GW Pharmaceuticals prosiguió el estudio conduzco de Guzman con un ensayo de etapa I / II aún no anunciado usando Sativex, una tintura sublingual de THC : CBD 1: 1, adjuntado con temozolomida, el régimen de quimioterapia estándar para el glioblastoma.
Según un aviso de prensa de GW Pharma de 2017, la administración de una combinación de Sativex y temozolomida aumentó la tasa de supervivencia a un año en un 30% y aumentó la supervivencia media a 550 días desde 369 días con temozolomida sola. 3
“[El estudio GW ] es el primer y hasta la actualidad el único ensayo que se hizo sobre cannabinoides y cáncer que es más sólido, que está bajo control por placebo y es aleatorio”, afirma Guzman. “Además es un ensayo doble ciego en el que ni el tolerante ni el médico saben si el tolerante está tomando Sativex o bien el placebo.
“Ese juicio además fue agradable. Ha incrementado nuestro optimismo de que quizás los medicamentos cannabinoides logren tener un efecto antitumoral, cuando menos en el glioblastoma y cuando menos en la etapa de recaída. Mas poseemos muy poca información clínica solo para un tipo concreto de cáncer. Quisiera que otros cánceres sean tratados con cannabinoides en el contexto de un ensayo clínico controlado. Mas hasta hoy no poseemos nada “.
Además están a puntito de empezar otros dos estudios clínicos de glioblastoma de etapa II . En esta ocasión, el conjunto de Guzmán valorará si una proporción de THC : CBD de 1: 1 combinada con el régimen común contra el cáncer es eficiente como régimen de primera línea en vez de un estado de recaída. 4 Y además se está reclutando hoy en día una investigación australiano (5) que inspecciona la tolerabilidad de distintas composiciones de cannabinoides adjuntado con la quimioterapia, la radioterapia o bien la inmunoterapia. 5
Avance retardado: el papel de la industria farmacéutica
Por más apasionantes que logren parecer estos descubrimientos clínicos iniciales, el avance todavía es lastimosamente retardado teniendo en cuenta cuánto tiempo científicos como Guzmán estuvieron estudiando el potencial antitumoral que tiene la planta de cannabis. Se ve que las posibilidades están en oposición a que un fármaco contra el cáncer a partir de cannabis llegue al mercado.
Guzmán: “Llevar a cabo investigación clínica con cannabinoides es muy difícil porque el THC , que para mí es el primordial ingrediente activo del cannabis, está bajo control por ONU y es una sustancia de lista 1. Entonces, está sujeto a limitaciones realmente fuertes en la producción, fabricación y exportación, etc. Eso supone que varios médicos y también inversores se atemorizan. No desean meterse en tanta burocracia y eligen decantarse por substancias que no están clasificadas en la lista 1. Generalmente, mi vivencia es que el listón que se establece para los ensayos clínicos de cannabinoides es más prominente que para otras substancias. “
El Dr. Guzmán recomienda que la destacable sepa de compañías farmacéuticas en el avance de medicamentos a partir de cannabis además puede estar frenando el avance.
“Los ensayos clínicos están controlados mayormente por las considerables compañias farmacéuticas que tienen los medios y elementos económicos. Filosóficamente, estoy en oposición a la protección del fármaco, mas por otro lado, las compañías farmacéuticas no harán ningún movimiento en ningún campo salvo que tengan la oportunidad de asegurar, patentar sus artículos o bien las advertencias de sus artículos. . Eso provoca que la investigación del cannabis sea más dificultosa porque los cannabinoides son artículos naturales y alguno puede extraerlos de la planta “.
Una manera de andar por el atolladero de la propiedad intelectual es concentrarse en condiciones extrañas con un estatus ‘huérfano’. El avance de un fármaco para patologías huérfanas puede ser una ruta más simple para conseguir la aprobación de marketing de la FDA y diviértete con numerosos incentivos, como exenciones fiscales. El estatus de huérfano además facilita que las substancias normalmente no patentables, como los cannabinoides apartados, consigan peculiaridad, y posiblemente sea la razón por la cual compañias como GW Pharmaceuticals se están concentrando en cánceres extraños como el glioblastoma.
Otra vía es patentar composiciones y des de cannabinoides concretas. Esta es otra especialidad de GW Pharma.
Guzmán: “Esencialmente, todo el campo del cannabis se quita con patentes de GW . Entonces, siempre que una exclusiva compañía empieza a interesarse en el campo y hace un primer repaso de cómo está la situación de las patentes, frecuentemente se marcha porque se da cuenta de que todo está esencialmente controlado por GW Pharma. Fueron muy capaces en ese sentido y son esencialmente los dueños de todos y cada uno de los derechos de propiedad intelectual, todos y cada uno de los derechos activos y derechos futuros en este campo. Eso además amedrenta a las compañías “.
Enfoque de ‘los pies en el suelo’ para pacientes con cáncer que toman cannabis
Las elecciones estratégicas tomadas en las salas de juntas de las compañías farmacéuticas que paralizan el avance de fármacos contra el cáncer basados en cannabinoides significan que pacientes como George Gannon tienen escasas elecciones más que conocer cómo conseguir su aceite de cannabis, con todas y cada una de las adversidades que ello implica. Dados los peligros de vida o bien muerte comprometidos, Guzmán no se enoja con la resolución de alguien de utilizar aceite de cannabis para el cáncer. Mas siente que la resolución de un tolerante ha de estar dirigida por el los pies en el suelo.
“Primero intente conseguir una preparación estandarizada ”, afirma Guzmán. “Uno debe entender cuando menos cuánto THC y CBD hay en la preparación, no ‘solo estoy tomando cannabis’. Hay un millón de géneros de cannabis. Conque intente comprender cuánto THC , CBD y otros elementos activos populares están presentes.
“Y si está usando aceite de cannabis como régimen, sepa cuando menos que el aceite se ha producido con buenas prácticas agrícolas y no está contaminado por diversos tipos de substancias tóxicas: restos de disolventes orgánicos, pesticidas, metales pesados, moho, etc.”
“Incluiría un régimen de administración a partir de muy poco , creciendo a lo largo de 3 o bien 4 semanas, hasta el momento en que se consiga una dosis estándar que sea bien soportada y cuando menos abiertamente eficiente. Seguidamente, combinaría THC y CBD , empezando con más CBD y después introduciendo THC para conseguir una preparación final balanceada. No puedo mencionar precisamente qué es un equilibrio. En la mayoría de los casos, puede decantarse por una proporción de, entre otras cosas, 1: 5 de THC : CBD .
“En tercer sitio, como los cannabinoides se amontonan en el cuerpo gracias a que son muy lipofílicos, teóricamente, los receptores tienen la posibilidad de desensibilizarse y perder respuesta. Entonces, estoy en pos de integrar determinados periodos de ‘lavado’ ocasionalmente en el momento en que cuando menos se descarta el THC . afirmaría, entre otras cosas, 3 semanas de cannabis más 4 o bien 5 días de lavado, por lo cual hay tiempo a fin de que los receptores CB1 [cannabinoides] se vuelvan a sensibilizar “.
Los pacientes tienen que comunicar la compromiso de normalizar el cannabis
Varios pacientes se sienten incómodos en el momento en que se combaten a la pregunta de si tienen que reportar a su oncólogo sobre el consumo de cannabis a lo largo del régimen del cáncer. Para Guzmán, reportar al grupo médico al cargo de la atención no es únicamente una cuestión de seguridad, sino más bien una manera considerable de incrementar la conciencia sobre el cannabis en nuestra profesión médica.
“Pienso que los pacientes son fundamentales, afirma. “Son actores clave en este esfuerzo y deben apretar a fin de que el cannabis se incorpore a la medicina común. Y una de las maneras es sencillamente normalizando su empleo de parte de los pacientes. Y sí, posiblemente en algunas ocasiones el médico reaccione de forma negativa. Mas debemos procurarlo.
“Antes de jubilarme”, sigue Guzmán, “me agradaría comprender que la utilización de cannabis como régimen contra el cáncer tuvo éxito. Mas por ahora no lo entendemos. Existen algunas señales preclínicas y además ciertas señales clínicas pequeñísimas que apoyan que probablemente halla un efecto anticanceroso de los cannabinoides.
“Debemos hacer mejor eso. Y la prueba debe provenir de distintas sitios. No solamente los estudios clínicos controlados, sino más bien además los estudios observacionales, los estudios de casos que reportan los médicos sobre pacientes particulares y además el papel activo que pienso que tienen que desempeñar los pacientes. Deben mover. Deben charlar de eso. Somos varios actores distintas y en grupo debemos trabajar de la mano, en caso contrario será irrealizable ”.
Notas al pie
- Paweł Śledziński, Joanna Zeyland, Ryszard Słomski y Agnieszka Nowak. El estado de hoy y las perspectivas futuras de los cannabinoides en la biología del cáncer . Cancer Med. 2018 Mar; 7 (3): 765–775.
- Guzmán M, Duarte MJ , Blázquez C, Ravina J, Rosa MC , Galve-Roperh, Sánchez C, Velasco G, González-Feria L.Una investigación clínico conduzco de Delta9-tetrahidrocannabinol en pacientes con glioblastoma multiforme recurrente . Br J Cancer. 2006 17 de julio; 95 (2): 197-203. Epub 2006 27 de junio.
- Globe Newswire. GW Pharmaceuticals consigue desenlaces positivos en el estudio de prueba de criterio de etapa 2 en glioma .
- ClinicalTrials.gov. Combinación de TN – TC11G ( THC + CBD ) con temozolomida y radioterapia en pacientes con glioblastoma otra vez diagnóstico ( GEINOCANN ) .
- Registro de ensayos clínicos de Australia y Novedosa Zelanda. Un ensayo clínico de etapa 2, aleatorizado y doble ciego que valora la tolerabilidad de dos des distintas de cannabis medicinal en pacientes con glioblastoma multiforme ( GBM ) .
Mary Biles es periodista, bloguera y educadora con vivencia en salud holística. Con sede entre el Reino Unido y España, está comprometida a reportar con precisión los adelantos en la investigación del cannabis medicinal.
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